sábado, 11 de julio de 2009

Hacer el amor contigo.

Aún no sé que se siente tener placer con alguien.
Sin embargo conozco todos los rincones de tu piel.
¡Yo no lo llamo sexo! lo llamo magia.
Pensé que me sentía sucia después de retar a mi conciencia, pero fue tu forma de acariciar la que me consoló mis dudas, fue tu cuerpo ardiendo el que me enseñó a tocar a una mujer, en el momento en el que con el movimiento entrega su alma.
No hay pensamientos sucios al recordarlo todo, yo sólo extraño tocar tus pechos, besarlos y así pegarme a ti hasta no distinguir mi piel de la tuya, hasta respirar de tu aire, y cansarme con tu

¡Hacer el amor contigo!,
no lo llamo sexo, lo llamo paz.

El compartir contigo mi inexperiencia necesita de mucho tiempo, porque satisfacer al cuerpo es muy fácil, pero satisfacer al corazón, necesita más que saber lo que se esta haciendo, dar todo tu amor mientras se hace.
En un solo momento se unir dos gritos para ahuyentar a la morbosidad, y es que hacer el amor contigo, es como gritar con todas mis fuerzas que te amo, pero en silencio absoluto, mientras penetro mis penas en ti, mientras dejo que la carne se transforme en alma, y mis instintos en sentimientos.Tu piel es mi refugio, mi lugar favorito, y todo lo demás no importa mientras la acaricio, y me dejo llevar por tus deseos de sentirte mujer por mi culpa.

Hacer el amor contigo, ¡no sé!, es una razón para creer en el cielo,
es una ilusión que me hace creer,
que por un momento
estoy en el.

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