DOS.

Hemos subido y bajado montañas rusas que nos envolvían girando
hemos tragado todo y de todo.Nos hemos fallado nos hemos rendido
y sin embargo estás
siempre estoy
con las sonrisas más tristes las miradas más raras.
Con esas ganas repentinas de besarte que una vez nos enredaron hasta el infinito.
Con corazones de caramelo brillante y rojo,
como tú,
y las calles que ya no son las que eran y nosotras que hemos cambiado.
y la ciudad que ha cambiado tanto sin primaveras ni otoños de por medio
con cartas que estallan en cualquier buzón antes de cruzar de ti a mi
de mi a ti en condenas que duran meses pero nunca años.
Y es hoy,
mañana,
pasado
que mando la ciudad de la niebla,
la ciudad dormida.
Cambia el lugar la forma y el modo.

Yo te quiero igual
de todos los coloresa media luz.